Louis Carrogis de Carmontelle hizo este retrato de la familia Mozart en 1763: Leopold, el padre, tocando el violín, el pequeño Wolfgang (Wolfi) tocando el clavicémbalo, acompañados por Maria Anna, (Nannerl) la hermana mayor de Wolfgang Amadeus Mozart. Muestra cómo Leopold tocaba con sus hijos en sus viajes por Europa, presentando a sus hijos como "prodigios" ante príncipes, obispos y personajes relevantes de la época. El cuadro está en el Museo Británico. En el siglo XVIII no se hacían fotos, evidentemente, y para que te retrataran tenías que ser alguien importante; a Mozart no le llegaban los pies al suelo y su música y su fama ya le precedían.
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